Pasión
En el silencio de la noche, suspiro afanes, caprichos que se
bordan en mi reflexión y que crean tu
orbe, dulce mundo donde habitas por las calles lejanas de luces solitarias y
escurridizas como resbaladillas de concreto, la luna brilla, estrellas entretejen el espejo del cielo que se refleja
en mi ventana, canta a lo lejos el viento musitando tu nombre, recorre los
árboles moviéndonos suavemente en el baile que entona la luna, esa luna que nos
une y que te dice en sus reflejos que te amo.
Taciturna, romántica y melancólica la luna se ha convertido
en mariposa tras la magia de poder volar a hallar tu reflejo. Duerme la noche,
plácida y serena, con sus velos de luz derramando polvo de estrellas para no
perder el camino que la lleve a encontrar
el alba, donde el faro de luz etérea, dorada, pura e imponente, encontrará por
fin tu mirada… esa mirada que logrará tocar mis ojos; esos ojos que se llenan de
pasión al ver los tuyos, derritiéndose en fugaces destellos, cual besos
cubiertos de plata…
Copyright © 2013 Araceli García.
